Laberinto sencillo

Durante las primeras etapas de la educación infantil, el docente debe motivar a los alumnos a realizar actividades que contribuyan con el desarrollo de sus habilidades y sus conocimientos. Una de las más frecuentadas por los docentes es la del uso de los laberintos sencillos. Sin embargo, ¿conoces los beneficios y ventajas que ofrecen los laberintos sencillos en los niños?

Una definición para evitar el extravío: ¿qué es un laberinto?

Para comprender bien cómo funcionan estas actividades, lo primero que se debe tener en claro es qué es exactamente un laberinto. En este sentido, podemos decir que se trata de una construcción o dibujo realizada con varios caminos que buscan fundirse para confundir o engañar a quien lo recorre, dificultando el proceso de circular en su área interior con el fin de encontrar la salida.

Los laberintos son construcciones que se caracterizan por generar confusión mental al crear varios caminos, pistas e ideas que guían a las personas hacia una salida falsa o real. Por lo tanto, este tipo de juegos son una excelente opción para mejorar la concentración y las habilidades psicomotoras de los estudiantes.

Todos en algún momento de nuestra vida o trayectoria escolar hemos realizado diferentes tipos de laberintos sencillos o más avanzados. Aunque estos parezcan simples juegos, su importancia hay que tenerla en cuenta, Dado que a través de su utilización son capaces de brindar la oportunidad –tanto a los maestros, como a los padres y representantes– de sacar el máximo provecho al desarrollo cognitivo de los más pequeños.

Además, a los niños y niñas les encanta poder realizar un laberinto sencillo, para ellos son muy divertidos y llamativos. Los laberintos por lo regular se hallan compuesto por una entrada y una salida, y ambas partes comunican el interior con el exterior de su superficie. Se caracterizan por poseer un área interna llena de muchos caminos que se entrecruzan entre sí. En este caso el objetivo del juego consiste en que todo jugador debe encontrar la salida correcta.

Ideas para divertirse en casa o en la escuela

Una manera sencilla de incentivar su creatividad es seleccionar alguna imagen atractiva, por ejemplo, de algún laberinto circular y dárselas para jugar. Tras resolver el laberinto sencillo se le puede colocar color y convertirlo en una imagen que muestre la evolución alcanzada.

Sacar provecho pedagógico de un laberinto sencillo en el mundo actual no representa mayor dificultad, ya que casi cualquier tema, fecha u ocasión puede representar la excusa para jugar con algún laberinto. Su presentación también varia: los hay impresos, agrupados en fichas, como recurso educativo tipo edufichas, digitales y reales.

Otra idea muy funcional consiste en buscar en internet ilustraciones tipo vector illustration y convertirlas en dibujos para colorear. Todo este material se puede imprimir y transformar en pequeños libros que serán un lindo recuerdo de la infancia. Además, se puede crear un laberinto scratch en línea, esto es, programar un laberinto en videojuego para luego jugar.

Para quienes manejan lenguajes de programación, Processing es un aliado para el desarrollo de nuevos e interesantes laberintos. En dicho entorno de desarrollo integrado, gracias a su facilidad para la utilización, es dable usar su tecnología de código abierto basado en Java, como medio para el diseño y la producción de laberintos multimedias e interactivos.

Como vemos, en el caso de los laberintos sencillos para niños hay toda una gama de opciones disponibles para escoger. Desde aplicaciones pagas hasta muchas herramientas gratis. Incluso, podemos personalizarlos o cambiando la forma de laberinto rectangular, a círculos, cuadrados o triángulos.

Los distintos beneficios de usar el laberinto sencillo en la educación infantil

Son, evidentemente, una estrategia de aprendizaje lúdico, caracterizada, asimismo, por poseer mucha versatilidad. Puede haberlos muy simples, hasta complejos y conceptuales como dedicados al Halloween o algún personaje infantil. No obstante, surge una interrogante muy importante ¿de qué modo puede un laberinto sencillo beneficiar al desarrollo de habilidades y conocimientos?

Se ha demostrado científicamente que los infantes tras jugar con un laberinto sencillo logran potenciar otras actividades como el dibujo. Esto permite que años después sepan diferenciar detalles en imágenes más complejas e incluso comprendan con rapidez conceptos como los vectores. Veamos algunos beneficios que este genera:

• Las actividades con el laberinto sencillo o laberintos avanzados son un tipo de recurso excelente si se pretende fomentar o mejorar las capacidades de atención en los más pequeños, una habilidad que se va formando a largo plazo.
• Asimismo, esta es una herramienta que permite mejorar la percepción del espacio, junto al fortalecimiento y desarrollo de la concentración.
• Sirve para estimular el desarrollo del pensamiento abstracto y la habilidad para la resolución de distintos tipos de problemas.
• También, en la etapa inicial de la educación infantil o preescolar, suelen implementarse dinámicas con el uso del laberinto sencillo. Allí se emplean como un ejercicio simple para lograr el estímulo y desarrollo de las funciones cognitivas desde edad temprana.
• Su uso favorece el progreso de la psicomotricidad, algo que contribuye mucho a la hora de aprender a escribir.
• Realizar un laberinto sencillo, les permite a los alumnos saber que sí son capaces de enfrentar nuevos retos. Y que también, pueden usar su inteligencia, siendo valientes y decididos, además de mantener un control total de sus emociones.  

En busca del momento ideal ¿desde qué edad los niños pueden resolver laberintos?

Jugar con los laberintos de papel son aquel tipo de actividades que se pueden realizar desde muy temprana edad. Básicamente, desde el instante cuando los niños tengan la capacidad de sostener un lápiz y trazar líneas en el papel. A partir de este momento, es cuando los niños se hallan preparados para la realización de sus primeros laberintos. Sin embargo, es en la primaria en donde los niños de entre los 5 y los 6 años de edad, pueden desarrollar habilidades cognitivas y psicomotoras necesarias para su avance integral.

No obstante, cabe destacar que el momento adecuado para que los niños puedan resolver laberintos está determinado por distintos factores. Estos son, aparte de su edad, la capacidad de concentración, su nivel de madurez mental y la resolución de problemas.

Claro está, en un principio el docente deberá comenzar utilizando un laberinto sencillo. Luego, con el progreso individual de cada uno de los estudiantes, se podrá ir subiendo la dificultad según cada caso. De este modo, se crean competencias o destrezas fundamentales y se van formando a lo largo de los años.

Fortalece habilidades con el laberinto sencillo

Para finalizar, es muy importante que desde temprana edad los niños y niñas comiencen a familiarizarse con los laberintos. Para ello, el docente debe ser capaz de crear estrategias que despierten la atención de los estudiantes ante esta actividad. De lo contrario, los niños pueden tardar mucho más tiempo en desarrollar habilidades de contracción, solución de problemas, análisis, etc.

Por último, si sientes vocación por la educación preescolar, te recomendamos realizar el Curso Especialista de aprendizaje basado en el juego o el curso de Auxiliar de Jardín de Infancia. El mismo te servirá de entrada en esta profesión y te brindará una perspectiva más clara sobre sus aspectos laborales. Este curso se encuentra disponible en Euroinnova, la Escuela de Negocios Especializada en Formación Online.

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